Escribí mis primeros cuentos cuando tenía 9 años. Me costo ganar los concursos literarios. No era tan buena y los demás niños presentaban trabajos que en realidad hacían sus padres. Volvía del colegio llorando. En casa me decían “Lee y escribí todos los días”,“No hay necesidad que otro te escriba el cuento”. Me expulsaban de las clases de dibujo, ballet y cerámica porque era inquieta y molestaba a los demás. Entonces como era buena en los deportes me anotaron en hockey, tenis, natación y atletismo. Hasta entrené con un preparador Olímpico. Corría rápido. Lo sigo haciendo. Pero yo quería escribir. A los 11 años gané mi primer premio literario y desde entonces no dejé de escribir. Aprendí un sistema.
La escritura como la creatividad consiste en prestar atención a las cosas que los demás pasan por alto, observar los detalles, escuchar lo que se dice bajito, preguntar, tomar notas donde se pueda.
La gente por lo general no toma nota y no escucha.
He construido una práctica de vida en torno a esto.
Pensar creativamente puede transformar el día. La creatividad implica aquello algo nuevo, sin precedentes. El cambio no es algo predecible. Por lo tanto, estamos en una tierra de conjeturas. En los presupuestos de las series para TV hay un renglón que dice “contingencias”: no es otra cosa que el dinero calculado para los imprevistos que puedan surgir durante el rodaje. Como en la vida, en la TV siempre aparecen cosas impensadas.
Vivo profesionalmente en esta tierra como directora creativa, productora audiovisual y consultora desde hace más de 20 años. Tuve éxitos y fracasos. He adquirido una sólida experiencia ejecutiva en el mundo del entretenimiento.
Desarrollé y produje más de 70 proyectos desde el concepto hasta la ejecución para marcas reconocidas como Netflix, Disney +, Cartoon Network, FOX, FX, Nat Geo, A&E, ESPN, FOX Sports, CBS, History Channel, entre muchas otras.
Estudié Ciencias de la Comunicación y storytelling.
Aprendí que existen conocimientos y técnicas específicas de gran valor en la gestión de la creatividad y el cambio.
Soy apasionada y creo firmemente que la creatividad es la fuerza más poderosa en los negocios.
Cuando no estoy trabajando, me encuentras en el campo junto a mis caballos.
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Aumentar la creatividad requiere trabajo. Vamos a poner el trasero en la silla.